miércoles, julio 28, 2010

Rant


Rant Casey no era malvado. Más bien parecía que estuviese intentando encontrar algo real en el mundo. Hoy día los niños no crecen conectados a nada, se pasan el tiempo enchufados y viviendo vidas que otra gente ha alucinado para ellos. Aventuras de segunda mano. Creo que Rant quería que todo el mundo experimentara por lo menos una aventura de verdad. En tanto que comunidad, algo que uniera a la gente.
El hecho de que todo el mundo en el pueblo viera la misma película antigua o alucinara la misma cúspide, eso no unía a la gente. Pero cuando aquel día los niños volvieron a sus casas, con los disfraces apelmazados por la sangre, y con tanta sangre debajo de las uñas que no se la pudieron sacar en una semana, y con el pelo apestando, eso hizo hablar a la gente. No se puede decir que estuvieran contentos, pero por lo menos la gente se juntó y habló.
Había pasado algo de verdad que sólo pertenecía a Middleton.




Tengo que admitir que el final de Rant me ha parecido bastante pesado, teniendo en más de un momento que saltarme algunas partes. Pero aún así todo el principio y la mitad del libro merecen la pena.



Chuck Palahniul. Rant. La vida de un asesino. Debolsillo. 2008.

1 comentario:

Ángel Muñoz dijo...

anotada la recomendación