sábado, abril 28, 2007


Hay algo especial
en salir de trabajar
cuando ya es de noche.

Tomarte una cerveza,
coger el coche,
comprarte un sándwich
que no alimenta nada
y conducir a casa.

Hay una sensación
que se te queda en el cuerpo
cuando llevas varios días
sin ver casi la luz del sol.

Al final el cuerpo
no sólo se acostumbra,
si no que poco a poco
lo disfruta.

Y mientras has puesto
la música en el coche
conduces sin pensar en nada,
sin preocuparte por nada.

Aunque esta noche
tu cama te espera vacía.

Hoy te tienes que enfrentar
al frío de una cama
demasiado tiempo
deshabitada.

Pero no pasa nada
siempre que esta noche
continúe sonando la misma
canción.



*Varios días trabajando de tarde/noche te trastocan.

No hay comentarios: