viernes, septiembre 12, 2008

Madrid en quince días


Las mismas cajas
que trajeron mi libro
desde la imprenta
ahora me sirven
para mudanza.

Te prometo
que me he dejado
los cuernos,
la vida,
el alma
en estos dos años.

He luchado,
he peleado
y he hecho todo
lo que estaba
en mis manos.

Y si hemos llegado
a este punto
no es por rendición,
por tomar un camino fácil,
por cerrar la puerta
de un portazo.

Si no que a veces,
como en la vida misma,
aunque te tapen las heridas
ya has perdido
demasiada sangre.


* Este poema se lo dedico a ella, porque dos años se dicen rápido pero no caben en un bolsillo.
Y porque los restos de piel debajo de las uñas demostrarán que luchamos como jabatos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta tu poema.Se adivina una importante historia, a la que le deseo un bonito final.
Un abrazo y todo lo mejor para ti.
Desde mi blog Socopoemas al que te invito a entrar.

Anónimo dijo...

no es precisamente la alegría de la huerta, pero es un poemo de bienvenida dedicado a ti, sir Das.

"cuando llegues
habrá de antes
seres de brazos abiertos

árboles deshojándose a tu paso
adoquines en posición de firme
y el asfalto como una alfombra de bienvenida

cuando llegues
la ciudad dormirá tranquila
porque habrá llovido
y es que sus tejados decían que hacía falta

sí, eso dicen las cubiertas por la noche, cuando todos duermen

que al aire gris le hace falta un mar de lágrimas

cuando llegues
todo tendrá una apariencia triste,

un autobús de huesos cargado de jornadas
el banco de la plaza de los vidrios rotos
y su mano que pide un préstamo a fondo perdido
el señor que riega la alfombra de bienvenida

madrugadas de ayer de aquí para allá con esa
prisa injusta que nos revuelve las metáforas…

cuando llegues
todo estará en su sito, como tú lo dejaste,

pero con nuevos
seres de brazos abiertos

esperando tu llegada

cuando llegues sabrán
que la poesía es peligrosa entre tus dedos
y que volverás a contar lo que se grabe en tus ojos.

cuando llegues
habrá de antes
seres de brazos abiertos
madrugadas de ayer de aquí para allá con esa
prisa injusta que nos revuelve las metáforas…"

Anónimo dijo...

Me pone triste leerte porque aún no conozco la historia. Ella me aconsejó el poema como anticipo. De todas maneras quiero darte als gracias porque sé que estos dos años me la has cuidado.
Un abrazo.

Gavi (blog: Vivir a conciencia)